Jaime Prieto Valladares

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Jaime Prieto Valladares 21 de julio del 2015 Harrisburg, Pennsylvania Interviewer: Elizabeth Miller

E: Hoy es el martes 21 de julio, 2015. Y podrías por favor empezar con su nombre.

J: Sí, mi nombre es Jaime Prieto Valladares y yo soy costa-riquense. Mi esposa es Silvia Regina de Lima. Es brasileña. Ahora, es de, mi esposa vive en Costa Rica y yo estoy por un tiempo acompañando a su familia, concretamente mi suegro. Y tenemos un hijo que se llama Tomás Atuye. Él vive también en Costa Rica con mi esposa.

(Interruption)

E: Y antes de empezar, podrías compartir un poco sobre tu profesión y cómo relaciona tu profesión con historias y entrevistas con personas.

J: Ah, sí. Bueno, es de...mi profesión concretamente es historia de iglesias. Y entonces al raíz de esta profesión, fue creciendo más mi interés también en la iglesia menonita. Tengo ya..voy a tener 50 años de estar involucrado en la iglesia menonita. Y un involucramiento de lleno, de verdad. Pasando por los jóvenes, la escuela dominical, los puestos de la iglesia, etcétera. De la convención de la iglesia menonita de Costa Rica, hasta llegar a servir al Congreso Mundial Menonita. Y fue en el Congreso Mundial Menonita donde desarrollé aún más el trabajo que ya había sido haciendo de historia, es de...por qué? [00:02:14;02]

Porque mis primeras experiencias de escribir sobre todo se basan en documentos escritos, pero yo me llegué dar cuenta que la experiencia viva de la fe en Cristo Jesús, sobretodo parte de una vivencia real de las personas. Entonces si quisiéramos hacer una historia que fuera una historia viva que habla de sus testimonios de fe. Entonces la mejor era que las mismas contaron su historia. Entonces al raíz de eso empecé a recoger muchas, muchas historias de vida.[00:02:53;03]

E: Y a través de este trabajo, realmente tú eres una de las personas que, que más conoce la historia de las comunidades en sí, a través de Latinoamérica. Yo creo.

J: Bueno, fue así que en ese momento, quizás ahora el panorama haya cambiado un poco, pero en ese momento casi no habían personas trabajando en la historia de la iglesia. Quizás donde más sí se ha trabajado es en Brasil y en Paraguay, pero no en los otros países. Y la obra es de menonita está prácticamente en todo los países en América Latina. Entonces, em, en ese momento yo asumí esa tarea y al raíz de eso, pude viajar a muchos países, casi todos los países de los que escribo, yo estuve en ellos. Casi unos tres o cuatro no. Pero la gran mayoría yo estuve. Entonces por eso podía hacer las entrevistas con las personas. [00:04:03;09]

Y claro que sí, ha sido una experiencia muy linda. Y creo que eso nació también a la raíz de que yo quedé huérfano desde muy niño. Crecí en un hogar de huérfanos. Y seguro después yo me da como la tarea de recoger los pedazos este como...eh, no resueltos de mi vida. O sea tratar de investigar--por qué me ocurrió esto, porqué ocurrió aquello? Y como la familia menonita desde muy niño, llego a ser parte de mi familia. Entonces esa dinámica de, de lucha existencial, de explicarme la vida a mí mismo, también me hizo despertar en ese gran interés de conocer también la familia anabautista, que llegó a ser mi familia. [00:04:50;20]

Entonces por allí un poco están las motivaciones también de orden personal en ese esfuerzo de recoger historias de vida. [00:05:02;25]

E: Y podrías dar algunos ejemplos de historias que has conocido a través de tu trabajo que tienen que ver con ejemplos de discipulado costoso o ejemplos de personas que han tenido que sufrir por su fe o que han dependido en la fe como una forma de resistencia al sufrimiento...

J: Sí. Es de, cuando cuando empecé este trabajo de que indudablemente el trabajo pastoral en América Latina en contextos de opresión lleva precisamente a las personas a dar testimonio de su fe en una forma radical. ¿Por qué? Porque en América Latina, a partir de los años 60, se empezaron a vivir todas lo que fueron las dictaduras, es de, políticas. Y entonces muchos pastores que empezaban a dar testimonio de su fe, se vieron confrontados con esa situación. [00:06:18;03]

No que ellos estuvieran metidos directamente en partidos políticos, digamos, sino que al desarrollar su trabajo pastoral en esos contextos. Entonces eso los llevó de pronto a enfrentarse a esas fuerzas, digamos, de las tinieblas que muchas veces, este, por mantener el poder, entonces también tienen incidencias negativas en las comunidades. Y las personas pues también viven en las comunidades, verdad. [00:06:51;07]

Entonces entre los testimonios sobresalientes, a mí me gustó mucho el testimonio de los hermanos en el Cono Sur, creo que en el Cono Sur. Es primeramente donde sale un pensamiento más claro en tono de esa temática. Porque Uruguay, Argentina, por ejemplo, por los años 60 y ya están experimentando la dictadura militar, verdad. Inclusive, Laverne Rutschman decía que parte de esa ??? o de ese río que nace en América Latina, un rio de protesta, de voz profética, nace precisamente en Uruguay, en Argentina. Él lo decía, verdad. [00:07:43;16]

Porque hay una variante de la teología de la liberación que sobretodo enfatiza los mártires o digamos los líderes que dieron su vida desde las tradiciones católicas. No así de las tradiciones protestantes. Pero si tenemos, por ejemplo, a Mauricio López, que fue uno de los pastores, eh, muy connotados en Argentina que desapareció, ¿no? Entonces tenemos ese, el testimonio de Miguel Brun, que lo narro en este libro brevemente. Pero que vale la pena explorar más de él, porque es una persona...él viene más de la iglesia metodista, pero trabajando dentro del seminario menonita evangélico menonita del Uruguay. Él va desarrollando un trabajo tanto en el orden psicológico, verdad, atendiendo jóvenes, también en las clases de teología. Así es como él llega a experimentar este, que es preso, que lo lleva a la cárcel. [00:08:57;07]

Lo mismo con James Miller, verdad. James Miller, sí. También me encantó mucho, mucho su testimonio. En el caso de Miguel Brun, bueno, es un pastor que es propio o nativo del Cono Sur. En caso de James, no, porque él es misionero. Pero su trabajo con los jóvenes, lo hace a él asumir, digamos, este...estas tareas hasta las últimas consecuencias. Son personas que sufren en la cárcel, que sufren este, lo que muchos de los otros, las otras personas que protestaron contra las injusticias, esto sufrieron. Entonces son personas que aún lo motivan porque uno piensa--hasta dónde las personas son capaces de arriesgar la vida de ellos, pero también sus familiares? En este caso por dar testimonio de su fe. [00:10:06;22]

Y y esto salía, muchas veces esto salió más a través de la entrevista que yo tuve con personas allegadas a ellas. En el caso de James, bueno, de su esposa.

E: Y en el caso de ellos, de James y de Miguel, ellos estaban trabajando con jóvenes y por eso el Estado le interesó de su trabajo, ¿cierto? ¿Cómo ...qué fue el punto de choque?

J: El punto de choque es lo siguiente. Digamos, eh, ellos van desarrollando también un trabajo entre las comunidades pobres. Ahorita no recuerdo el nombre, si era Timbués, este...eran como conglomeradas grandes de población y jóvenes, y ellos tenía su trabajo pastoral con los jóvenes, verdad. Lo que pasa es que los jóvenes en ese momento están al nivel nacional en una explosión grande de protesta que incluye protestas en la universidad. Y en estos sectores pobres también por su misma condición de pobreza ¿no? Y como ellos tenían que atender a esos jóvenes, o van desarrollando la pastoral, su idea es compartir el evangelio con esos jóvenes. Pero esos jóvenes a la misma vez están preocupados por lo que están ocurriendo en la sociedad. Al ofrecer ellos el servicio, digamos, como de psicología, atendiendo tienen que escuchar también por su situación política. Porque ellos están protestando, porque se sienten como marginados en todas las esferas de su vida. Porque así es. Cuando hay una dictadura militar, la dictadura militar cubre casi todas las esferas, prácticamente hasta la esfera privada. Ya no es privada. Es controlada por las fuerzas. [00:12:07;04]

Entonces, este...al conocer ellos de esa situación, este...son llevados presos y la policía quiere trillar información de ellos. Pero digamos, a nivel de esas profesiones, unos de los requisitos para desarrollar esa profesión es que uno no va a compartir lo que otra persona compartió con uno. Porque podrían riesgo a esas personas. Bueno, trabajo similar tienen los pastores en este sentido. Porque escuchan en las confesiones. Otros les preguntan sobre muchas cosas, verdad. Yo escuché, inclusive, de un pastor, por ejemplo, en Guatemala que llegó a confesar. Pero él era al contrario, él siendo un militar llegó a castigar a otros jóvenes. Entonces él se convirtió. Entonces él sentía esa carga en su corazón que había actuado mal, torturado y todo. Pero ese pastor tampoco puede decir quién es esa persona. Es viendo al otro lado de la calle. [00:13:29;04]

Pero este...esos eran los motivos, porque la policía quería obtener información de jóvenes, quiénes eran los jóvenes, qué estaban haciendo, verdad. Entonces son situaciones muy propia de un régimen de seguridad. Prácticamente ellos querían tener control, pero de todo. Y si la iglesia está ubicada en un lugar donde serán estas situaciones o estas protestas, entonces la policía van a encontrar también los canales para bloquear o tratar de obtener la mayor información posible. Sí. Fueron unos testimonios muy, muy tremendos. Este...y así por..yo diría que quizás hay otras tradiciones, podría ver otras tradiciones que no sean anabautistas que dieron un testimonio aún más radical, verdad. [00:14:41;05]

Inclusive ahora en Centroamérica hubo celebraciones muy grandes de Monseñor Romero. Yo participé en varias de ellas. Pero uno ve que realmente, uno puede decir que son mártires o que han sufrido por la causa de Cristo. ¿Por qué? Porque su testimonio último es dar fe de Jesucristo, de la vida de Jesucristo. Y por dar testimonio de eso, es que sufren persecución. Entonces para mí allí es donde está el punto clave a entender a ellos como personas, digamos, para nosotros son un ejemplo grande, porque ellos están dispuestos a todo, poder (????) seguir dando testimonio de esa fe. [00:15:29;07]

E: Y además de los profesores del seminario en Uruguay, que pueda pensar en, digamos, en un ejemplo más...

J: Sí, digamos, yo traigo aquí unos ejemplos de otras personas, digamos. Yo traigo uno que es de Samuel Cisneros. Samuel Cisneros es una persona ligada a la iglesia menonita en El Salvador. Ahora su testimonio a mí me parece que sería más como en el sentido de que, eh, la fe se convierte como en una balsa o una fuerza para enfrentar situaciones donde la vida humana se encuentra como en peligro, verdad. En el caso de Samuel Cisneros, bueno, es como una persona muy humilde, muy sencilla. Que desde joven él trabajó en minas, sacando, por ejemplo plomo, verdad. Ese material. O también convirtiendo piedras, a un tipo de piedra que se convierte en cal. Y en los año 50, digamos, para gente que era muy pobre, eso eran las profesiones que existían. Ellos tenían que recoger la leña y , recoger grandes cantidades de leña, y hervir estas piedras, sacar la material ya en forma de cal. Colocarlo en sacos, llevarlos en caballos o burros para las fábricas o para la ciudad para venderlo. [00:17:22;11]

Porque en ese tiempo tampoco existían grandes fábricas como de cemento y cosas así. Y la cal era muy utilizada como forma de pintar las casas y cosas así. Para construcción. Entonces se desarrolla él en estos ambientes muy, muy sencillos. Como campesino también sembrando maíz. Pero al raíz de la tremenda situación que vivía El Salvador, de orden económica y política, él emigra para Honduras. Fue caso de muchos campesinos de los años 50, a partir de los años 50. Y los 60. Emigraron para Honduras, buscando como vivir. En, en El Salvador, por ejemplo, una hectárea, una hectárea son 7.500 metros cuadrados. Ay, perdón, una manzana! Nosotros llamamos una manzana. Una hectárea es 10.000. Una manzana es un poquito más pequeña, pero él habla más de manzana. Son 7.500 metros cuadrados. [00:18:30;21]

Entonces podría valer en El Salvador 500 pesos en ese tiempo. Estamos hablando de 1950. Y en Honduras costaría tal vez 10 pesos. O sea de 500 a 10. Y son países limítrofes. Entonces por eso muchos salvadoreños se fueron para allá buscando sobrevivir. Él fue una de esas familias. Y se ubicó en terreno cerca de la frontera con Honduras, pero al lado de Honduras. Entonces él es una persona que testifica de su fe como la fe de él le ayudó para poder suportar esos momentos difíciles. Sobre todo del año 1969, cuando fue la guerra entre El Salvador y Honduras. Al principio se le llamó la Guerra de Fútbol, porque un partido de fútbol entre Honduras y El Salvador. Pero en realidad no era eso. Que era una cantidad enorme de campesinos salvadoreños están pasando para Honduras. Y este...buscando como sobrevivir. Y entonces llegue momento en que los intereses de los dos gobiernos entran en conflicto, verdad. Y entonces eso hace que este hondureño tome preso a muchos salvadoreños, los lleve a los cárceles, verdad. Luego los salga expulsada del territorio hondureño hacia El Salvador. [00:20:14;22]

Ahora eso está mediado todo por los conflictos también internos de los países y la opresión contra las familias pobres. Entonces el caso de él es muy interesante porque él inclusive llevaba al cárcel. Él tenía, él tenía residencia hondureña. Y entonces los dijeron, Los hondureños que tiene residencia pueden ir a dormir a sus casas, pero tienen que notificarse temprano ante el comandante para poder tener ese derecho. Pero los hijos de él, las hijas de él--que ya tienen hijos--de 18 años o así, no tenía residencia. O sea, vivían en Honduras, pero no tenían residencia. Entonces finalmente ellos son otra vez expatriados para su país de El Salvador.[00:21:09;29]

Entonces lo interesante de su testimonio de él es contar cómo la fe en esas situaciones tan difíciles, de sobrevivencia humana, experimentando la cárcel, después de había ido de un país al otro para sobrevivir, es como ellos se afianzan a su fe para sobrevivir esa situación y empezar de nuevo. Verdad, como campesinos y pobres. [00:21:37;18]

Y el otro caso que tenía, que yo le puesto es de un hombre de...más le puesto uno...un hombre anónimo. En ese momento pensé que era lo mejor para no decir su nombre, pero yo le, le he puesto el nombre de Edgardo Benavides. Es de, de él es muy, muy impresionante la historia de él. Todos estos hermanos de las iglesias menonitas de El Salvador es interesante, porque son trasfondos religiosos provenientes de muy diversas iglesias. O sea usted puede ver que hay influencias de la Misión Centroamericana. Hay influencias también de la Asamblea de Dios, que es pentecostal. Y después tardíamente ya llega la iglesia menonita, que está llegando en los años, principios de los años 80. [00:22:40;03]

Entonces en ellos entremezclan las espiritualidades provenientes de otras iglesias. También de la iglesia Católica. En el caso de esta persona, que le estamos denominando así de Edgardo Benavides. En este uno puede ver en él todavía la espiritualidad católica. Y de él sí me impresionó mucho el testimonio de él, porque el testimonio de él se da en medio del conflicto de la guerra civil de El Salvador. Que es en los años 60 y 70. Entonces él experimentó algo tan tremendo que yo digo, ¿Cómo es posible que una persona logre experimentar todo eso y de todas maneras quiere seguir viviendo en su país, verdad? [00:23:32;26] Porque dice que tenía una casita pequeña. Vivía con su esposa y tenía como un negocito así donde venden azúcar, pan, cosas así. Y una noche alguien vino y tocó su puerta, y la esposa de él fue a abrir. Y en el momento en que ella abrió, recibió un balazo en la frente. Entonces inmediatamente allí ella murió. Y los que llegaron él nunca supusiera guerrillas o si eran grupos paramilitares, verdad, de derecha, porque era una guerra, es de...entre hermanos ¿no? De los, de grupos paramilitares de izquierda y los de derecha. [00:24:18;16]

Allí murió ella y...él tenía así como un altar, como llena con fotos. Allí vi la foto de su esposa, verdad, y tenía algunas candelas encendidas. Pero eso no era todo. Él me contó otra historia de un hermano de él. Y me contó una vez llegaron unos grupos armados, pero con machetes, y lo, y lo cortaron, lo trituraron todo su cuerpo. Y los hicieron así como tirado el cuerpo sobre el campo. Entonces él recogió como un saco, como de ?????, él iba recogiendo todos los pedazos de su, de su hermano. [00:25:13;06]

Y...para darle sepultura. Entonces yo me acordé de un texto bíblico. Hay un texto, creo que es de una mujer. De una mejor que es violada, ¿no?, del Antiguo Testamento, creo que es. Y que luego las partes de ella son tiradas, unas al norte, otras al sur, otras al este, al oeste. Sí en los cuatro puntos. Es uno de los relatos más sanguinarios del Antiguo Testamento. Pero cuando yo al escuchar la historia de él, yo pensaba, uyyy ¿cómo es posible, verdad? Que todo esto se viera. Y esto es uno de los casos muy propios del contexto que vivó El Salvador, ¿verdad? [00:25:54;14]

Y él dice entonces que recogió lo pedazos de su hermano, todo, para darle sepultura, lo recogió en un saco. Y luego me dijo, Mis hijos, eh, muchos de los salvadoreños al raíz de la guerra civil, es de, lo que hicieron fue inmigrar a los Estados Unidos. Entonces creo que un hijo de él inmigró a los Estados Unidos. Estando en los Estados Unidos, él...él hijo de él lo invitó para ir allá. Entonces él fue a visitar a su hijo en los Estados Unidos. Pero dice que él solo suportó quedarse en los Estados Unidos tres meses, porque él deseaba estar en El Salvador. Deseaba estar en...en el lugar donde estaban, quedaron algunos de sus familiares, algunos de sus familiares. Y yo digo, Uy, ¿cómo es posible si es un lugar que le convoca la muerte, el asesinato de su esposa? Este...la trituración de su hermano. Y sin embargo él no prefiera vivir en los Estados Unidos, que supuestamente tendría un confort. Ya es un señor bastante mayor y todo. [00:27:17;22]

Pero quería volver allá. Y yo puedo notar sí que mucha de esa fuerza que tiene viene de, a pesar de todas las experiencias que vivió, allí se encuentra raizada su vida, su su recuerdo de su niñez, de su pasado, pero también la fe en Dios. Y él tiene así como un altar con sus familiares. Y se ve que una persona que lleva muy profunda su fe en Jesucristo. Entonces yo creo que eso lo hace a él este, lo hizo decidir por vivir allá. Y no en otro contexto. A pesar de que su hijo vive allá, es también un hijo. Pero él prefiere vivir allá. [00:28:08;23]

Entonces esos son como testimonios que, que uno a lo largo de trabajo, eh, va encontrando, verdad, donde se mezcla la vida cotidianeidad, de la cotidianeidad que está cruzada a veces por la tristeza o por la lucha por la justicia como también por esas situaciones concretas de injusticia donde la persona, digamos, se aferra de su fe para seguir adelante. Entonces eso podrían ser algunos de los testimonios que podría dar.

E: ¿Por qué es importante compartir esas historias entre...no solo, por ejemplo, entre la iglesia en El Salvador, sino en la iglesia en toda Latinoamérica y la iglesia al nivel mundial? ¿Por qué es importante? ¿Qué puede contribuir a nuestra fe?

J: Bueno, yo creo que en nuestros orígenes, este...yo llegué a un convencimiento, que yo soy anabautista no porque el destino ya me ubicó en una iglesia menonita, verdad, sino más bien por convicción. Entonces nuestra historia es una historia que nace en el martirio, de grupos, digamos, que asumieron la fe en Jesucristo como una crítica también radical a las socie...a las estructuras injustas del siglo 16. [00:29:46;29]

Entonces es, allí está raizada la identidad anabautista, en un testimonio radical de Cristo. Este, sin el cual, en el cual está presente también el testimonio por sangre. Porque Hans Denck y Hans Hutt, sobretodo nos decían que podemos dar un testimonio. El bautismo en el Espíritu, el bautismo en el agua, que es más un ritual también o una mostración de fe. Y el bautismo en sangre. Entonces ese bautismo en sangre está señalado de que el seguimiento de Jesús es posible que también va a ver sufrimiento. Pero entonces cuando se presente ese momento de sufrimiento, ya fuese por una situación particular de la familia o por dar testimonio de su fe, ¿nosotros cómo vamos a reaccionar o cómo vamos a continuar siendo fieles a Jesucristo? [00:30:50;07]

Entonces al escuchar la situación concreta que están viviendo otros hermanos, pero este siglo, en este momento ¿verdad?, y no solo del siglo 16. Yo creo que tendríamos como quizás más fuerza, más coraje, para nosotros también estar en esa disposición de seguir a Jesucristo. Y saber de que el sufrimiento es parte de ser humano. Lo que pasa es que él se diseña de diversas formas que puede ser de una causa muy personal como puedan ser también por la contribución nuestra a los valores del Reino de Dios. [00:31:34;25]

E: Muchas gracias, Jaime. Por compartir así con nosotros desde tus experiencias en este trabajo sobre la historia en Latinoamérica. ¿Hay algo más que deseas compartir, antes de cerrar?

J: No. No, yo deseo decir que yo deseo compartir y...en realidad este, estoy seguro que hay muchos otros ejemplos. Es de, lo que pasa es que me ha encontrado una situación ahora que no me ha sido posible esa tarea. Pero sí, con mucho gusto yo deseara seguir compartiendo, porque pienso que es una tarea muy linda y que debe ser realmente compartida con muchos hermanos, porque con el paso de los años un se da cuenta de que sí, que las personas van a recibir mucha fuerza, es de, de Dios escuchando los testimonios de otras personas. Y como vivieron su fe en esos momentos de, de dolor o de dificultad. Es un proyecto muy lindo. Me parece que sí es una excelente idea. Y como está partiendo de la historia verídica de las personas, entonces tiene credibilidad. Digamos que tiene credibilidad. Y de sustento a otras personas.